
Una cuestión, duda, dilema o asunto que se trata de aclarar, una dificultad que se busca superar; un conjunto de hechos o circunstancias que dificultan la consecución de algún fin; en un contexto de ciencias, el planteamiento de una situación cuya respuesta desconocida debe obtenerse a través de métodos científicos. De acuerdo con la Real Academia Española, estas son las definiciones de la palabra “problema” que en un contexto general se refiere a una dificultad que necesita ser resuelta.
En este contexto de lo que es y significa un problema, hace unos días me encontré de nuevo con una frase que ha sido atribuida a Steve Jobs, fundador de Apple, y que dice: “Si defines el problema correctamente, prácticamente tienes la solución”. Ya antes en este espacio hemos platicado sobre los problemas y la importancia de llegar a conocer sus causas raíz.
Todo problema, defecto o error, tiene una explicación y una causa que lo origina. Generalmente, por ejemplo, en el medio de la manufactura, existen herramientas que ayudan a entender los problemas o modos de falla, a analizarlos a través de sus posibles causas y de encontrar cuál es efectivamente el origen de dicho problema o error. Probablemente el método más conocido es el llamado “5 porqués” (5 Whys), ideado por Toyota, que consiste en preguntar repetidamente “¿por qué?” hasta que ya no exista duda del origen del problema.
Por ejemplo, en una empresa manufacturera, un embarque llegó tarde al cliente; ese se considera el problema o error. En este caso el proveedor debe corregir y erradicar la causa de ese retraso. ¿Por qué llegó tarde el embarque? Porque se envió tarde. ¿Por qué se envió tarde? Porque la caja no estaba en el lugar correcto cuando pasó el camión a recogerlo y se fue sin la caja. ¿Por qué estaba la caja en el lugar incorrecto? Porque la persona de almacén no sabía que había un área especial para dejar la caja. ¿Por qué la persona no sabía del área especial? Porque la persona que lo hizo no había sido capacitada acerca del procedimiento de embarque. ¿Por qué no fue capacitada? Porque esa persona normalmente no trabaja en almacén sino en producción. ¿Por qué estaba trabajando en almacén? Porque no hay un procedimiento a prueba de error que evite que una persona de producción que no ha sido entrenada en almacén haga funciones de almacén.
Y así sucesivamente hasta que no exista una pregunta más y se pueda determinar que en este caso es necesario tener candados para que en almacén no opere quien no está capacitado y que una caja de producto terminado acabe en el lugar incorrecto, poniendo en riesgo el embarque. A eso se refería Steve Jobs, el problema no es solo que el embarque llegó tarde, el embarque tarde pasa a ser consecuencia de la raíz del problema que tiene que ver con un procedimiento de entrenamiento o control en el manejo del producto terminado. Un procedimiento que no fue hecho a prueba de error.
En el caso de México, como país en su conjunto, ¿será que le hemos dedicado tiempo a definir los 3, 5, 10 problemas principales? ¿Habremos tenido un gobierno en los últimos 40 años que le haya dedicado atención, tiempo, recursos y ancho de banda a entender y definir esos problemas? Básicamente a poner las mulas enfrente de la carreta y apuntadas en la dirección correcta. ¿Quién en México está definiendo el problema? ¿Quién está trabajando en encontrar las causas raíz de esos problemas?
Si alguien se atreviera a preguntarle a la presidenta Sheinbaum en una de sus conferencias mañaneras ¿cuáles son, en su opinión, los 5 problemas principales de México?, ¿qué creen que respondería ella? Considerando que es una presidenta a la que se le asocia con ser científica, uno pensaría que su respuesta no sería en el sentido de que es culpa de Calderón que tengamos tantos problemas, sino que podría compartirnos abiertamente cuáles son los temas que le quitan el sueño o la mantienen ocupada. Tampoco esperaría uno que nos diga que como goza 70% de aprobación es una señal de que México va requetebien y no tiene problemas.
Una presidenta o cualquier político sensato suponemos tendría en su lista temas (problemas) de seguridad, pobreza, educación, orden, salud, crecimiento económico como los que habría que definir y entender para poder corregir lo antes posible. Y ahí es donde me parece cabe el planteamiento y la solicitud razonable a quienes gobiernan el país, en sus tres niveles y tres poderes, que por favor nos compartan su lista de problemas y cómo van en la definición y búsqueda de causas raíz.
De ahí, el siguiente paso sería escoger un método para una vez definido el problema y encontrada su causa raíz, armar el plan para corregir y erradicar dichos problemas, con la participación de expertos en las distintas materias y dedicando agresivamente los recursos que hoy tal vez se le dedican (tiran) a los chocolates, el gas, el auto, la aerolínea o la vacuna del bienestar. Nota: Ignorar el problema NO es solucionarlo.
La mayoría de los problemas, de todos tamaños, que perciben los ciudadanos y la sociedad en México son atendidos, si bien nos va, por gobiernos y autoridades respectivas de una manera reactiva y no organizada. El ambiente que priva (desde hace tiempo) es el de un departamento de bomberos y no el de un grupo organizado de personas inteligentes y capaces. Los problemas no se resuelven muchas veces por falta de análisis y de un proceso ordenado de resolución.
Si quien es responsable de resolver un problema, como esos del “ABC” [a) no estado de derecho; b) no imperio de la ley; c) falta de crecimiento económico] que mencionamos aquí la semana pasada, no se pregunta siquiera por qué existen los problemas y cuáles son sus causas raíz, será imposible resolverlos y los avances aparentes no serán sostenibles en el mediano y largo plazo.
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